El equipo verde ganó el segundo partido. Un gol de Marlos Moreno fue suficiente para igualar la serie, pero con un buen planteamiento defensivo el cuadro barranquillero mantuvo el empate y ambos equipos definirán desde los 12 pasos.
Fiel al fútbol demostrado durante toda la temporada y apelando a una combinación entre la precisión en el juego y la capacidad de sorpresa de su juego de conjunto, Atlético Nacional ni siquiera le dio tiempo al Júnior para pararse en la cancha de juego y en apenas 32 segundos igualó la serie final del fútbol colombiano con gol de Marlos Moreno.
Y lo hizo con una sucesión de siete toques que el jugador verdolaga culminó con elocuencia para satisfacción de los más de 40 mil hinchas congregados este domingo en el Atanasio Girardot. Moreno aprovechó un pase de Macnelly Torres, controló con derecha, enganchó hacia la izquierda y remató cruzado para dejar sin chance al portero juniorista. La algarabía se tomó Medellín. Y Antioquia. Y Bogotá y muchas regiones del país, en las que el cuadro paisa cuenta por miles su fanaticada.
A partir de ese momento, todos vaticinaban goleada a favor de los verdes, mientras que el equipo barranquillero (que como local se impuso 2-1 a mitad de semana) veía caer fulminada su estrategia de juego para el partido de vuelta.
Sin embargo, no fue así. Nacional intentó por distintas vías y no fue alcanzó a marcar otra vez, con lo cual los nervios y la tensión se quedaron para los segundos 45 minutos del partido.
Ambos equipos saltaron al tramado del Atanasio con cambios en sus nóminas respecto al partido de ida. En el cuadro paisa regresaron Gilberto García, Sebastián Pérez y Marlos Moreno, mientras que el equipo barranquillero apuestó por una línea de tres en el medio campo con Celis, Narváez y Correa. Jarlan Barrera, el sacrificado. (Así llegaron Nacional y Júnior a la final de la Liga Águila)
Segundo tiempo
Nacional encaró la segunda parte con el mismo ímpetu, pero careció de precisión. Su juego de pases controlados, que tradicionalmente adormece al rival, no fue suficiente para aumentar la diferencia. José Néstor Pékerman, técnico de la selección Colombia, no perdía detalle desde la tribuna. Los delegados de las autoridades del fútbol profesional preparaban las medallas para el campeón. Y la tribuna estaba enardecida. Gritaba. Gritaba con rabia en busca del gol que no aparecía.
Llegó el minuto 59 y tuvo lugar la jugada más dramática de la complementaria. En un intento por anticipar al delantero junioristaRoberto Ovelar, justo cuando iba a cabecear tras cobro de tiro libre, Murillo abrió más de la cuenta los brazos y con su codo derecho le rompió la ceja izquierda al delantero. Ni amarilla le sacaron, pese a que el central estaba al pie de la jugada. Incluso la acción fue en el área de 16,50. Penal,decían los junioristas.
Quince minutos después, los dos volantes centrales de Nacional (Mejia y Sebastián Pérez) ya estaban con tarjeta amarilla.
Nacional:
Franco Armani; Gilberto García, Óscar Murillo, Alexis Hernríquez, Farid Díaz; Alex Mejía, Sebastián Pérez, Macnelly Torres, Marlos Moreno; Jéfferson Duque y Yimmi Chará
Júnior:
Sebastián Viera; Iván Vélez, William Tesillo, Andrés Felipe Correa, Juan Guillermo Domínguez; Guillermo Celis, Luis Narváez, Gustavo Cuellar; Vladimir Hernández, Édison Toloza y Roberto Ovelar
Nenhum comentário:
Postar um comentário