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Atlético de Madrid

Saúl Ñíguez ya está en casa

• El centrocampista, que sufrió un traumatismo renal con hematoma, volvió el sábado a Madrid tras tres días ingresado en Leverkusen

• Saúl Ñíguez ya está en casa. El centrocampista del Atlético de Madrid recibió el alta tras permanecer tres días en una clínica de Leverkusen por el traumatismo renal con hematoma sufrido el pasado miércoles en el partido de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.

  "Por fin! Ya en casa, preparado para empezar con una pequeña recuperación. GRACIAS por todos los mensajes de ánimo", escribió el sábado por la noche Saúl en su cuenta oficial de 'twitter', junto a una foto sentado en un sofá, sonriente y con los pulgares hacia arriba.

  El futbolista, que sufrió un golpe en la zona renal en el primer tiempo del encuentro ante el Bayer Leverkusen, en el que fue sustituido en el minuto 42 por Raúl García, quedó ingresado el mismo miércoles en observación en el centro hospitalario de la ciudad alemana, donde fue sometido a un TAC renal y donde, el jueves, le introdujeron un catéter para drenar la zona.

  Tres días después regresó a la capital de España acompañado del doctor José María Villalón, jefe de los servicios médicos del club y que ha seguido su evolución del traumatismo junto al equipo de la clínica Leverkusen encabezado por los doctores Jürgen Zumbé y Carl-G. König.

• Sin coartada por Europa

  • El Málaga confirmó la permanencia virtual doblegando al Getafe

  • Los azulones, siempre a remolque a pesar del doblete de Álvaro

  • Juanmi abrió el choque, Darder firmó un golazo y Horta cerró el marcador

  • Parecía ser cruel pero resultó ser bisoño. El Málaga dominó al Getafepero fue incapaz de matar el choque y le concedió alas al rival con cada golpe que le daba. No estaban para fiestas los azulones. Así que el Málaga tiró de repertorio juvenil para sellar la permanencia (41 puntos) y quedarse sin coartada para decir que no pelea por Europa. A Gracia le salen las cuentas. [NARRACIÓN Y ESTADÍSTICAS]

    El Getafe debió percatarse de que La Rosaleda no suele esperar a que el rival tantee las ganas de su equipo. Poco más de cinco minutos y el Málaga ya fallaba ocasiones. Un dos para dos entreJuanmi y Samuel no sirvió para que el segundo definiese. Jonaestuvo rápido desactivando el peligro pero resultó que su zaga no se percató de nada. Dos minutos después, una gran cabalgada deRosales por la línea de cal puso al venezolano en la línea de tres cuartos rival y sacó un centro rápido y perfecto al punto de penalti. Medio gol que Juanmi no desperdició cabeceando a la red. Está en racha, explotando de una vez en Primera. Tiene cuerda, picardía, clase y hechuras de punta diferente. Apunta a la docena de goles.

    El gol le dio un punto de tranquilidad al Málaga perfecto. Le sirvió para defender sin excesivo problema las embestidas de Pedro León y salir a la contra como tanto le gusta. El Getafe no acabó de entrar en la trampa y los andaluces tomaron entonces la pelota para empezar a perdonar. Hinestroza, de espaldas, frenó el segundo con la mano dentro del área. Penalti claro al limbo; Jona sacó una buena mano a un disparo de Castillejo; Angeleri definió como un defensa clásico en el área pequeña. El Málaga se gustaba, era feroz y plástico, pero no eficaz.

    No ahondó en la crisis de identidad del Getafe y se fue al descanso suspirando por un error de Kameni que salvó Boka y un remate de Álvaro en boca de gol que atajó el camerunés. Mala señal.

    El Getafe salió mordiendo. Peligro y un córner en menos de un minuto: ataques sin miramientos a un Málaga demasiado confiando. Pedro León es la diferencia azulona y una de sus carreras por la derecha acabó en un buen centro al segundo palo donde Álvaroremató a placer. Empate financiado por el pasmo local. Hubo reacción.

    El Málaga tardó un minuto en situarse en buena lid en terreno rival.Darder, a diez metros de la frontal, no tenía a nadie encima y mandó un obús rozando el larguero, cerca de la escuadra. Inapelable. Un gol de otro tiempo, de bastantes quilates. El Málaga se quedó despierto en el choque, le dejó al Getafe la única opción de contragolpear y fue encontrando chispazos de inspiración en cada ataque. Castillejo tuvo uno muy bonito: regates en el área en paralelo a la línea de fondo para, sin que nadie supiese cómo, sacar un balón a boca de gol donde Horta firmó la sentencia del Getafe. Restaban 20 minutos de descarada celebración local que le sirvió a Álvaro para meter miedo al aprovechar una pifia a balón parado local. Volvió a rematar en el segundo palo y consiguió el doblete. Al final, el Málaga encontró oficio para quedarse el choque y la categoría.

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